La palabra “tafonomía” proviene del griego, taphos (tumba) y nomos (ley). Es una parte de la paleontología que estudia la descomposición, preservación, dispersión, erosión, entierro o exposición de organismos muertos. Posteriormente se incorporaron otras disciplinas como antropología forense denominándose tafonomía forense.
La tafonomía forense se puede definir como el estudio de los procesos postmortem que afectan la preservación, observación o recuperación de los organismos muertos, la reconstrucción de su biología o ecología, o la reconstrucción de las circunstancias de su muerte. Así pues, la tafonomía forense es el estudio de todos aquellos cambios postmortem que tienen lugar en los restos humanos hasta que estos son recuperados.
De acuerdo con Noelia Zanetti la tafonomía forense examina las variables como condiciones climáticas, estado del cadáver, proliferación de algas, vegetación, acción de animales, etc., pueden intervenir cadáveres o restos de animales o humanos, por lo tanto pueden cambiar la evidencia en la investigación.
Tanto vertebrados como invertebrados pueden ser agentes importantes de la tafonomía. La actividad carroñera puede alterar u obstaculizar evidencia de la causa de muerte, acelerar la descomposición y desarticulación, dispersar, modificar y destruir el esqueleto humano, dificultando la identificación del mismo.
Por otro lado, Luis Lloveras Roca en su artículo de Tafonomía forense, menciona que esta se contempla como la parte de la antropología que utiliza modelos tafonómicos, aproximaciones y análisis en contextos forenses para estimar el intervalo postmortem.
Algo en lo que coinciden los dos autores mencionados anteriormente, es que en un sentido paleontológico o arqueológico, los insectos fósiles, sus restos y/o marcas pueden proveer información valiosa sobre la tafonomía del cadáver, las prácticas funerarias de las sociedades antiguas, la actividad que el artrópodo tenía en la tumba.
Fases Tafonómicas
De acuerdo con Luis Lloveras menciona las siguientes fases:
Fase necrológica: Hace referencia al proceso de muerte de un organismo o parte de él. El análisis tafonómico incide en todos los factores relacionados con el momento de la muerte o asociados con la causa de la misma. En esta fase se inicia la descomposición de las partes blandas.
Fase bioestrartinómica: Incluye todos los procesos e interacciones que tienen lugar después de la muerte del organismo, hasta que este queda enterrado.
Fase diagenética: Estudia la transformación de los materiales biológicos una vez sepultados y hasta su recuperación e incluye todas las interacciones que tienen lugar entre el organismo o parte de este. En este proceso si los restos no son recuperados antes, acaba con la desintegración y disolución del cuerpo o con su fosilización.
Estas solo son algunas fases explicadas por el autor mencionado anteriormente, cabe mencionar que en este mismo artículo, describen a mayor rasgo estas fases.
Como se ha visto la tafonomía forense ha sido de gran importancia ya que va a estudiar los procesos postmortem que afectan a la preservación de los organismos muertos, además va a analizar los cambios postmortem que tienen lugar en los restos humanos hasta que son recuperados. Es así que la tafonomía se apoya de la antropología, arqueología, entomología, por mencionar algunas, con la finalidad de analizar cada uno de estos procesos.